El Reglamento sobre Obligaciones de Uso Justo (Cerdos) de 2025 es el resultado directo de la crisis porcina de 2021 y 2022 que expuso graves desequilibrios de poder en la cadena de suministro y la falta de relaciones contractuales creíbles entre vendedores y compradores de cerdos.
Las nuevas regulaciones del sector porcino, desarrolladas en consulta con la industria durante los últimos tres años, siguen una legislación similar ya vigente en la industria láctea, y el proceso también está en curso para los sectores de productos frescos y huevos.

Las regulaciones se implementarán gradualmente a lo largo de 12 meses. A partir del 13 de agosto, todos los nuevos contratos de suministro de cerdos deberán formalizarse por escrito. Esto también se aplicará a los contratos existentes a partir del 13 de agosto de 2026.
Los contratos deberán incluir, entre otras cosas, términos claros sobre:
- La duración del acuerdo.
- El mecanismo de fijación de precios utilizado.
- El suministro de cantidades de cerdos contratadas, tanto para compradores como para vendedores.
- Cláusulas de fuerza mayor en relación con la recogida o entrega de cerdos para productores y procesadores.
- Un procedimiento de resolución de disputas.
Durante sus conversaciones con el Departamento de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Asuntos Rurales (Defra), la Asociación Nacional del Cerdo (NPA, por sus siglas en inglés) insistió en que la regulación debería incluir la facultad de revisar y modificar las regulaciones. El Secretario de Estado debe revisar las regulaciones y publicar un informe al menos cada cinco años, que incluya una evaluación sobre la necesidad de modificar las disposiciones.
13 de agosto de 2025 | NPA | Reino Unido | https://nationalpigassociation.co.uk